La verdad es que si no fuera porque nos hicimos amigos de unos panchos que tienen un ciber que está acá en Bariloche, no escribiría una mierda.
Pero acá llueve así que mucho por hacer no hay.
Contar todo lo que hicimos hasta ahora me da fiaca, pero estuvimos en lugares recopados. A mi me gustó Esquel y el Bolsón me pareció una verdadera garompa. Re triste y oscuro el lugar. Y ni un puto hippy vi.
Lo bueno (o lo malo, ya no sé) que tuvo el Bolsón es que Falopa finalmente debutó pero no voy a decir con quién porque a las amigas no se las buchonea.
Lo cierto es que una noche habíamos fumado un canuto y a estos dos boludos les dio por el romance, así que me fui a caminar sola y cuando volví me habían puesto un cartel afuera de la carpa que decía "no te hortivés"
¿Ortiba yo?, pensé. Todavía que me voy y les dejo la papita al alcance de la mano!
Me re garcaron. Esa noche dormí en la carpa de unos chabones que estaban al lado. Eran medio pedorros, de una agrupación católica de nosedonde. Hasta rezaban los nabos, pero tuvieron buena onda conmigo y nunca lo olvidaré. Porque si era por los que dicen llamarse "mis amigos" me comían los animales salvajes.
El Bolsón una mierda.
Ni para poesía dio.
Ahora en Bariloche está mejor. Nos pasamos verdugueando pendejos de viajes de egresados. Siempre garroneamos alguna cosa. Algunos vienen forrados y son demasiado fáciles. Nos pagan la entrada para ir a bailar, nos compran chocolatitos y a veces hasta zafamos el morfi. Falopa se pone loco porque es un celoso cuida de mierda. Y enamorado peor. No se rescata ni a palos.
No se da cuenta que si no fuera por nosotras ya hubieramos pegado la vuelta hace rato.
En unos días vamos a San Martín de los Andes. A Villa La Angostura la vamos a pasar por un tubo porque nos dijeron que es re careta, aunque capaz que pasamos aunque sea un día para encontrarnos con Alfonsina que parece es media cheta y va a estar ahí.
Este poema lo escribí hoy a la tarde en que estaba al pedo esperando que "los tortolitos" vuelvan de caminar. Es un poema que, además del valor literario que tiene, se ve realzado por su carácter testimonial.
Se lo dedico a Ellos, a pesar de todo

El amor les brota por todos los orificios
Están calientes y se nota
El amor es algo muy bonito
Esos gestos embobados
Ella que se ríe de sus chistes pelotudos
El que está al palo todo el día
Y se le nota.

Soy feliz si mis amigos son felices
Aunque me caguen y esten siempre de acuerdo
para hacer lo contrario a lo que quiero
El amor es lo más maravilloso
Pero yo también pagué la entrada al camping
Me toca la tercera parte de la carpa
Si molesto, me lo dicen.
Pueden irse.